CIUDAD DE MÉXICO.- La Secretaría de Gobernación (Segob) busca prohibir las máquinas electrónicas en casinos y salas de juegos en el país, una medida que a decir de la industria tendría un alto impacto en la recaudación tributaria y los empleos.
Hace una semana, la Segob publicó un anteproyecto de decreto en la Comisión Nacional de Mejora Regulatoria (Conamer) con el que busca prohibir las apuestas o sorteos en máquinas electrónicas como tragamonedas, simuladores de bingo o cartas, entre otras.
También busca eliminar la figura de “operador” dentro de la industria de apuestas y sorteos, con la cual los permisionarios o empresas podían adquirir una máquina de juegos a través de un tercero.
Según la Segob, esta última figura carecía de control ante la propia autoridad, pues los proveedores de estos aparatos terminaban teniendo una relación directa con sus contratistas pasando a ser “sub permisionarios”.
La Asociación de Permisionarios, Operadores y Proveedores de la Industria del Entretenimiento y Juego de Apuestas (AIEJA) advirtió que dicha limitación podría tener un impacto de hasta 90 por ciento en la recaudación del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), que se cobra en juegos y sorteos.
Además de una caída en ingresos tributarios, los nuevos lineamientos de la Segob podrían provocar el cierre masivo de salas de juegos y desempleo dentro del mercado de casinos, salas de juegos y apuestas.
De acuerdo con datos de esta organización, la industria del juego con apuestas genera alrededor de 50 mil empleos directos y cerca de 120 mil indirectos. Destacó que en 2021 los permisionarios pagaron cerca de mil 31 millones de pesos por concepto de participaciones al erario.
En el mismo portal de Conamer, la Asociación de Permisionarios y Proveedores de Juegos y Sorteos, encabezada por Alfonso Pérez Lizaur, expuso que de aprobarse el anteproyecto, la industria de las apuestas podría equipararse a “ver televisión en blanco y negro”.
“La participación de los jugadores en las salas de juego disminuiría drásticamente, en función de que la oferta de entretenimiento se vería gravemente afectada; se perderían miles de fuentes de empleos directos e indirectos, así como grandes cantidades de aportaciones al erario y entidades federativas”, agregó.
Estadísticas oficiales de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) señalan que en los últimos cuatro años el IEPS de juegos y sorteos representó menos del uno por ciento de todos los ingresos registrados por este impuesto, que también aplica para gasolinas, bebidas alcohólicas, cigarros o plaguicidas.
Tan sólo en los primeros seis meses de 2023, la dependencia obtuvo poco más de mil 511.5 millones de pesos por impuestos en juegos y sorteos, el equivalente a 0.79 por ciento de todo el IEPS recaudado en el mismo periodo.
“La prohibición de la Segob no es porque haya evasión fiscal de los permisionarios, ya sea de IVA o ISR, simplemente va en el sentido de hacer cumplir la normativa vigente y que no haya más de las figuras autorizadas para operar en juegos de apuestas”, explicó Juvenal Lobato Díaz, especialista en derecho fiscal.
Agregó que en caso de prohibirse la instalación de máquinas electrónicas, la mayor afectación sería para las contribuciones locales, ya que la legislación actual obliga a los permisionarios o casinos a pagar un impuesto por la instalación y eventual operación de estos centros.
Fuente: El Sol de México