El paro de las plantas productoras de cerveza por la contingencia sanitaria de Covid-19 no sólo ha generado un problema de desabasto y alza en los precios, sino que también podría generar que México deje de ser una potencia exportadora y de ocupar la primera posición en el mundo, a ser una nación importadora.
“México es el país número uno a nivel global de exportación de cerveza, ahorita que no estamos produciendo hay muchos compromisos que se tiene que cumplir, podríamos pasar de ser potencia exportadora a importadores; el impacto ante la falta producción, exportación y distribución es evidente, impacta en la economía”, afirmó la directora general de Cerveceros de México, Karla Siqueiros.
En entrevista con Notimex, precisó que el valor de las exportaciones de cerveza fue de 4,858 millones de dólares (mdd), lo que representa el 25% de las exportaciones agroindustriales de México y la balanza comercial de cerveza alcanzó un superávit de 4,763 mdd.
La representante del sector cervecero en México comentó que en muchos otros países afectados por la pandemia de Covid-19, la industria fue considerada una industria esencial y no paró por la importancia de la huella de la cadena de valor
Tan solo en el país, agregó, el sector genera 650,000 empleos directos e indirectos, desde el campo, producción y comercialización, los cuales podrían estar en riesgo de continuar el cierre de sus operaciones.
En este sentido, la directora de la organización señaló lo que en este momento lo que se está viendo es el impacto económico en cuanto los ingresos de los comercios que venden cerveza, ya que por ejemplo, hasta el 40% de las ventas totales de los tenderos provienen de la cerveza.
Asimismo, expuso que de la cebada viven más de 5,000 familias de agricultores, pero las compañías compraron lo que habían acordado, 18,000 toneladas como apoyo; la otra parte que tiene que ver con la comercialización del producto que tiene que ver con las tienditas, restaurantes, teatros, bares, pero puede estar en riesgo la cadena de valor si uno de estos eslabones falta o está flojo.
Siqueiros mencionó que están en pláticas con las autoridades para volver a operar y han presentado propuestas para que se les considere una industria esencial, tomando en cuenta el valor de la cadena y el impacto que tiene en miles de familias, ya que cuentan con la capacidad de producir y distribuir con los más altos estándares de seguridad y sanidad.
“Por parte de Sader (Secretaría de Agricultura) tuvimos la carta donde se reconoció la relevancia de la cerveza en el sector agroindustrial, la cerveza representa el 25% de las exportaciones agroindustriales del país, pero por el lado de salud no ha habido apertura para este u otros sectores”, detalló.
La directora de Cerveceros de México dijo que es necesario que la cadena de valor este funcionando desde el eslabón donde arranca hasta el último y están preparados para cuando las autoridades sanitarias les digan que pueden empezar otra vez a producir hacerlo con las más altas medidas sanitarias y de seguridad.
Escasez y altos precios
El paro de plantas de cerveza derivado de la cuarentena ha generado en algunas zonas del país escasez de productos en pequeñas tienditas, tiendas de conveniencia e incluso supermercados, así como plataformas de comercio electrónico, además del incremento de precios en algunos casos.
“Lo que está es lo que se distribuyó antes de que se parara la producción, nosotros dejamos de producir, dejamos de distribuir, el problema o lo que se está viendo de escasez es por la capacidad que tienen los propios negocios de almacenar; desde que paramos el 6 de abril no ha salido ninguna cerveza de ninguna planta o centro de distribución”, precisó Siqueiros.
Y es que, comentó, una tiendita no tiene una bodega y ahí es donde las compañías llegaban a entregar el producto con cierta periodicidad, en el caso de las tiendas de autoservicio, cuya capacidad de almacenaje es mucho más amplia, es lo que están sacando
La semana pasada, el director de Relación con Inversionistas de Femsa, Juan Fonseca, señaló que el abasto de cerveza es un problema, ya que, si bien todavía tienen stock de Modelo y Heineken, cuando se queden sin cerveza, lo que pasará en las siguientes semanas, eso será negativo para sus ventas.
En un recorrido, se comprobó la escasez de cerveza en algunos supermercados, tiendas de conveniencia, así como tienditas, además del incremento de precios en algunos de los casos.
En tanto, en Beerhouse, plataforma de Grupo Modelo, no están disponibles marcas tradicionales como Modelo Especial clara y oscura, Victoria y Corona; a su vez, Heineken comenzó a vender su portafolio por medio de Mercado Libre, donde solo ya están disponibles marcas importadas o su variedad de cidras.
En las tiendas de autoservicio, la cerveza que aún esta a la venta son marcas importadas o artesanales, cuyo precio normalmente es mayor que las de Grupo Modelo o Heineken, entre los 30 y 70 pesos.
Mientras que muchas de las tiendas de barrio no cuentan con cerveza desde hace días y otras han tenido que incrementar los precios para costear los costos de traslado desde expendios u abarroteras.
Por ejemplo, el precio de las “caguamas” pasó de un promedio de 38 pesos a 55 pesos, lo que representa un incremento de 44.7%, mientras que los latones de 455 mililitros pasaron de 18 pesos por unidad hasta los 25 pesos, lo que representa un alza de 38.8%.
Según datos de la consultora Nielsen, las ventas de bebidas alcohólicas crecieron 63% entre el 5 y el 11 de abril, derivado de las medidas implementadas por el gobierno para contrarrestar los contagios de Covid-19.
La firma señala que luego de que Heineken y Modelo hicieron público su anuncio de detener la producción temporalmente, la categoría de cerveza se convirtió en la segunda de mayor aportación al crecimiento en supermercados, con un crecimiento de 83% en valor, tan sólo detrás de leche blanca.