3 millones de pesos. Es el dinero que se ha perdido, por la falta de comunicación entre el Ayuntamiento de Othón P. Blanco y la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado.
En el 2019, el gobierno de Othoniel Segovia Martínez anunció la pavimentación y la instalación de alumbrado público en la calle Manuel Altamirano, lo que permitió mejorar la conexión en la zona norte de Chetumal.
Pero poco nos duró el gusto a los chetumaleños. Seis meses después, la CAPA comenzó a romper esa vía para instalar un sistema de drenaje, tirando toda la inversión inicial a la basura.
Sí, ambas obras eran necesarias. ¡Pero caramba! ¿No hubiera sido más fácil si se ponían de acuerdo para evitar tal desperdicio?Según CAPA, ya tenían programada esa obra desde el 2018. Entonces el Ayuntamiento pudo haber realizado una simple llamada, para corroborar si esa zona sería objeto de una inversión de ese tipo, y aplazar la suya.
Y no quitamos responsabilidad a la Comisión de Agua Potable: nos es difícil de creer que sus trabajadores (o el director) nunca pasaron por ese lugar mientras el Municipio iniciaba los trabajos de pavimentación y pensaron “¡Ey! Nosotros romperemos esa calle en unos meses. ¡Mejor deténganse!Tal vez no les importó, así de simple.
Quizás el Ayuntamiento si lo sabía, pero aún así quiso realizar la inversión, tendiendo en cuenta que muy probablemente los trabajos de CAPA tardarían más allá de la administración municipal.
Especular las razones quizás es demasiado ocioso. Pero lo que sí debe hacerse es fincar responsabilidades. Porque por culpa de uno u otro grupo, o de ambos, 3 millones de pesos fueron desperdiciados.