
WASHINGTON.- El gobierno del presidente Donald Trump proporcionó esta semana a las autoridades de deportación los datos personales —incluido el estatus migratorio— de millones de personas inscritas en el Medicaid, un acto que podría facilitar la localización de personas como parte de su amplia ofensiva contra la inmigración.
En un memorando interno y correos electrónicos obtenidos por The Associated Press se muestra que las autoridades del Medicaid intentaron bloquear, sin éxito, la transferencia de datos, alegando preocupaciones jurídicas y éticas.
No obstante, dos altos asesores del secretario de Salud, Robert F. Kennedy Jr., ordenaron que el conjunto de datos se entregara al Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés), según se muestra en los correos electrónicos. A los funcionarios de los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid se les dio solo 54 minutos para acatar la orden.
El conjunto de datos incluye la información de personas que viven en California, Illinois, el Estado de Washington y Washington, D.C., todos los cuales permiten que personas que no son ciudadanos estadounidenses se inscriban en programas del Medicaid, mismas que les pagan sus gastos utilizando únicamente fondos aportados por los contribuyentes estatales.
Los Centros de Servicios de Medicare transfirieron la información en un momento en que el gobierno de Trump intensifica sus redadas migratorias en el sur de California.
Además de ayudar a las autoridades a localizar a los migrantes, señalaron expertos, el gobierno también podría usar la información para frustrar las esperanzas de aquellos que desean obtener la residencia legal, la residencia permanente o naturalizarse si alguna vez obtuvieron beneficios del Medicaid financiados por el Gobierno federal.
Fuente: El Financiero