CHETUMAL.- El cierre de fronteras entre México y Belice prolongará el impacto económico que ha sufrido Chetumal a raíz de la pandemia de Covid-19, consideró Ligia Sierra Aguilar, vicepresidenta de la Frontera Sur de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco).
Detalló que antes de la crisis sanitaria, 33% de la economía de la zona Sur de Quintana Roo dependía del mercado beliceño debido al cruce de ciudadanos de ese país para realizar compras del lado mexicano de la frontera, por lo que en esa misma proporción se ha desplomado la actividad comercial en Chetumal desde hace un año.
“Entendemos que por las cuestiones de protección a la salud se toman estas medidas, pero bueno, esperemos que haya una reapertura pronta y que no se vaya a prolongar”, refirió.
El Gobierno federal ordenó el cierre fronterizo con Belice y Guatemala hasta el 21 de abril próximo para evitar la propagación del virus.
Sierra Aguilar explicó que desde marzo del 2020 el Gobierno de Belice impuso indefinidamente restricciones en su frontera con México, debido a un aumento de 61.6% en contagios de Covid-19 entre sus ciudadanos.
El libre tránsito entre México y el país centroamericano inició desde la segunda quincena de marzo, cuando Belice detectó los primeros dos casos de Covid-19.
El Gobierno beliceño especificó que sólo se permitirán los vuelos de carga y embarques comerciales de mensajería, así como los viajes médicos de emergencia y vuelos de emergencia aprobados por el Ministerio de Salud, de acuerdo con el Departamento de Aviación Civil; al mismo tiempo se restringen los viajes de placer y ocio, así como los cruceros para realizar comprar del lado mexicano.
Esas mismas limitantes impuso el Gobierno mexicano desde el viernes 19 de marzo para ciudadanos mexicanos que pretendan cruzar a Belice desde Chetumal.
Según la Secretaría de Desarrollo Económico, actualmente el intercambio comercial en esta frontera alcanza los 60 millones de dólares anuales.
Aunado a ello, desde el 2012 Belice flexibilizó el comercio bilateral con México, estableciendo un listado de 34 fracciones arancelarias que pueden ser introducidos a su país exentas de permiso de importación, con lo que se benefició a productores de la península de Yucatán y el sureste mexicano como Tabasco y Chiapas.
Los productos que desde el 1 de septiembre del 2012 están libres de permiso de importación en Belice son: carnes, aves de corral, granos, frutas y verduras, harinas, cacahuates, productos de pasta, cítricos, jaleas, mermeladas, salsas, jabones, blanqueadores, fósforos, playeras, barcos de motor y muebles de madera (bambú o ratán).
Fuente: El Economista