(Chetumal, 25 de agosto) Los dueños del perrito “Max” pagaron una multa por 8 mil 688 pesos y la atención médica del can, luego de arrastrarlo por varias calles desde una camioneta el pasado viernes, en el fraccionamiento las Américas I.
De acuerdo con la versión de los propietarios del can, la “abuela” que se encontraba de visita amarró al perro en la boya trasera de la camioneta, para que pueda limpiar el patio mientras jugaban los niños en la calle.
Fue entonces cuando el jefe de familia salió a realizar una diligencia, sin percatarse de que venía arrastrando al perro. No fue sino hasta que llegó a la tienda que una mujer le dijo lo que sucedía, pero ante la llegada de los vecinos furiosos que presenciaban tal hecho, decidió arrancar de nuevo su camioneta de regreso a su domicilio.
Rafael Rivero, represente de la organización “Habla por mí”, explicó que de inmediato presentaron la denuncia al respecto, y tras una investigación se logró que se imponga una sanción económica equivalente a 100 UMAS, dinero el cual será dirigido a beneficio de refugios de animales.
El can, por su parte, presentó graves raspones en la piel que requirieron sutura de ocho puntos entre el pecho y el hombro, aunque ya se encuentra estable.