CIUDAD DE MÉXICO.- La cacería deportiva de bisonte americano (Bison bison), especie en peligro de extinción, de acuerdo con la Norma Oficial Mexicana 059, está autorizada por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), en los Estados de Chihuahua, Coahuila, Durango, Nuevo León, San Luis Potosí, Sonora y Tamaulipas.
De acuerdo con datos obtenidos a través de la Plataforma Nacional de Transparencia, son 19 las Unidades de Manejo para la Conservación de la Vida Silvestre (UMA’s), “con actividades cinegéticas y planes de manejo aprobados que garanticen el aprovechamiento sostenible”, para la especie bisonte americano.
En la respuesta emitida el 28 de septiembre de 2020 a una solicitud de información pública, la propia Semarnat establece que Coahuila es la entidad donde hay un mayor número de UMA’s dedicadas a la cacería de bisonte americano con un total de cinco.
El propio Programa de Acción para la Conservación de la Especie (PACE), de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), reconoce que en México existen ranchos que mantienen bisontes americanos confinados para fines cinegéticos y/o recreativos.
De acuerdo con la Semarnat, el rancho Buena Vista en el municipio de Ocampo, Coahuila, envuelto en un gran escándalo por la reciente difusión en Instagram y Facebook de la presunta cacería ilegal de un bisonte en su predio de 25 mil hectáreas, no cuenta con permiso vigente de aprovechamiento o por lo menos no bajo ese nombre o razón social.
La pregunta que la Dirección General de Vida Silvestre de la Semarnat no ha querido responder es: ¿desde cuándo el rancho Buena Vista no tiene permiso de caza deportiva de bisonte americano?, porque en su propia página de Internet y redes sociales (antes de que las borrara), presumía decenas de fotografías de ejemplares cazados con rifles Magnum o flechas por un costo de alrededor de 153 mil pesos.
Además de que personas que gustan de esta actividad mantienen en la red imágenes de su visita en años anteriores al rancho Buena Vista, donde cazaron bisontes.
Según los registros de la Semarnat, en México existen dos mil 596 Unidades de Manejo para la Conservación de la Vida Silvestre (UMA’s) de vida libre con actividad cinegética para mil 441 especies diferentes.
Algunas de los animales emblemáticos que se pueden cazar en nuestro país a pesar de estar en riesgo son el borrego cimarrón (96 UMA’s); venado bura (548 UMA’s); puma (mil 146 UMA’s) y jaguar (9 UMA’s).
La actividad cinegética se puede realizar en 30 Estados de la República Mexicana, excepto en la Ciudad de México y Colima.
El aprovechamiento extractivo en nuestro país (captura, caza o colecta) se permite en especies en riesgo, a excepción de tortugas, mamíferos marinos, loros y primates, según establece el artículo 60 de la Ley General de Vida Silvestre.
Pero aunque la norma también señala claramente que se debe dar prioridad a las actividades de restauración, repoblamiento, reintroducción e investigación científica, este enunciado se presta a la libre interpretación, que permite excesos, encubrimientos y problemas operativos cuando se trata de animales en peligro, advirtió Yolanda Alaniz, consultora ambiental.
La también exdirectora general de Vida Silvestre de la Semarnat, en el período de junio a octubre de 2016, destacó que tratándose de especies protegidas debe acreditarse su legal procedencia y que sus descendientes nacieron de reproducción controlada.
Los requisitos para los dueños de los predios es que tengan registro como Unidad de Manejo para la Conservación de la Vida Silvestre (UMA), autorización de aprovechamiento, que hayan adquirido los cintillos de cobro cinegético, y que cada año presenten su informe de actividades y plan de manejo ante la Semarnat.
Fuente: Excélsior