CIUDAD DE MÉXICO.- El recorte presupuestal del 75 por ciento en gastos de operación y servicios generales, ordenado en el decreto presidencial del pasado 23 de abril, coloca al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) “al borde de la parálisis e incumplimiento de su objeto social y la razón de su existencia, mermado y debilitado”, lo que tiene “muy preocupada” a la comunidad académica de la dependencia.
“Sólo hay 15 millones de pesos disponibles para la investigación, con lo cual dificulta su operatividad y le despoja de su razón de ser, de su objeto social que es la investigación, la conservación, la protección y la difusión de los monumentos y la solución a problemas sociales del país”, comentó ayer en rueda de prensa virtual Gustavo Ramírez, secretario general del Sindicato Nacional de Profesores de Investigación Científica y Docencia del INAH, quien agregó que para este año estaban destinados 155 millones de pesos a la investigación. “Es una bicoca. No alcanza para hacer una investigación de calidad, que genere un verdadero impacto”, señaló.
Con una misiva dirigida al presidente Andrés Manuel López Obrador, que presentaron en el encuentro con los medios, los investigadores arrancaron una campaña de defensa, que inicialmente durará tres meses, para “hacer visible” a este instituto ante la sociedad y la opinión pública.
El trabajo que realiza el INAH se transforma en una gran aportación económica que, en conjunto, en 2018 aportó el 8.7 por ciento del PIB; es decir, mil 221 billones de pesos, de los cuales el instituto sólo recibió para el año pasado 3 mil 900 mdp.