Personas que han superado el covid-19 han comentado que se les han caído algunos dientes sin sangrar. Otras afirman que sus encías son más sensibles o que sus dientes han tomado un color gris o se han astillado, indicó la periodista Wudan Yan para The New York Times.
La periodista cuenta que, a principios de noviembre, Farah Khemili se encontraba comiendo una menta y notó una sensación extraña en la boca: un diente inferior se movía contra su lengua.
La señora Khemili, de 43 años, no había perdido ninguna pieza adulta hasta entonces. Tocó el diente para confirmar que estaba suelto, pues pensaba que el problema podría ser la menta. Al día siguiente, el diente salió cayó de su boca hacia su mano, sin sangre ni dolor.
Khemili sobrevivió a una batalla contra el coronavirus durante la primavera, por lo que se unió a un grupo de apoyo en línea, pues ha soportado una gran cantidad de síntomas experimentados por otros pacientes recuperados: niebla mental, dolores musculares y dolores nerviosos.
De acuerdo con Wudan Yan, aún no existen pruebas rigurosas de que contraer covid-19 pueda provocar la pérdida de dientes, pero, entre el grupo de apoyo de la señora Khemili, encontró a otras personas que también sufrieron pérdidas de piezas dentales o encías sensibles.
Quienes han sufrido dicha pérdida sospechan que el coronavirus podría estar relacionado con el padecimiento, con lo que se sumaría a otros síntomas como dedos de los pies hinchados y pérdida de cabello.
Algunos dentistas, en consideración a la falta de datos, se han mostrado escépticos de que el covid-19 pueda causar síntomas dentales, indica Yan.
“Es extremadamente raro que los dientes se caigan literalmente de sus alvéolos”, dijo el doctor David Okano, periodoncista de la Universidad de Utah.
Sin embargo, los problemas dentales existentes pueden empeorar como resultado del coronavirus, agregó, especialmente a medida que los pacientes se recuperan de las infecciones agudas y lidian con sus efectos a largo plazo.
Algunos expertos dicen que los médicos y dentistas deben estar abiertos a tales posibilidades, especialmente porque más del 47 por ciento de los adultos de 30 años o más tienen algún tipo de enfermedad periodontal, entre las que se incluyen infecciones e inflamación de las encías y los huesos que rodean los dientes, según un informe de 2012 de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
“Estamos comenzando a examinar algunos de los síntomas desconcertantes que los pacientes sufren, tras meses después de haberse recuperado del covid-19”, dijo el doctor William W. Li, presidente y médico director de la Fundación Angiogénesis, organización que estudia la salud los vasos sanguíneos.
Si bien la señora Khemili había tomado mayores precauciones en su cuidado, tenía antecedentes de problemas dentales antes de contraer el coronavirus. Cuando fue al dentista, al día siguiente de que perdiera la pieza, descubrió que sus encías no estaban infectadas, pero que tenía una pérdida ósea significativa por fumar.
La pareja de la señora Khemeli investigó el caso en Survivor Corp, una página de Facebook para personas que han vivido el covid-19. Allí descubrió que Diana Berrent, fundadora de la página, comentó que su hijo de 12 años había perdido uno de sus dientes adultos, algunos meses después de haber presentado un caso leve de coronavirus.
En el grupo de Facebook, otras personas han compartido su experiencia sobre la caída de dientes sin sangrar, como el caso de una mujer que perdió un diente mientras comía helado o Eileen Luciano de Edison, a quien se le salió un molar superior, a principios de noviembre, cuando usaba hilo dental.
La caída de dientes sin sangre es inusual, dijo el doctor Li, y proporciona una pista de que podría estar pasando algo con los vasos sanguíneos de las encías.
Los dentistas no han visto muchos de estos casos y algunos descartan las afirmaciones individuales, pero médicos como el doctor Li dicen que la profesión debe estar atenta a las consecuencias inesperadas que tiene el covid-19.
“Los pacientes pueden estar aportando nuevos hallazgos”, dijo, los médicos y dentistas deben cooperar para comprender los efectos del coronavirus a largo plazo en los dientes.
Fuente: Milenio