
CHETUMAL.- La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) clausuró 17 predios forestales en Campeche, Quintana Roo y Yucatán entre julio y agosto, tras detectar desmontes y cambios de uso de suelo sin autorización de la Semarnat, principalmente para monocultivos agroindustriales operados por comunidades menonitas.
Quintana Roo: más de 2,500 hectáreas afectadas
En los municipios de José María Morelos, Bacalar y el Área de Protección de Flora y Fauna Bala’an K’aax, se documentó la conversión ilegal de 2,531.12 hectáreas de selva. Además, fue asegurado un tractor con bomba de fumigación.
Campeche: clausuras en Hopelchén
En el municipio de Hopelchén, la Profepa clausuró predios en los ejidos Xmaben y Francisco J. Mújica, con afectaciones sobre 247.85 hectáreas, y aseguró maquinaria pesada tipo oruga.
Yucatán: daños en Tekax
En el municipio de Tekax, fueron clausurados predios en los ejidos Nohalal, Emiliano Zapata y Poccheil, donde se registraron impactos en 968.62 hectáreas. También se aseguraron diversas maquinarias: una Caterpillar D8, una retroexcavadora, una perforadora de pozo y tres tractores agrícolas.
Balance regional
En total, las clausuras en los tres estados sumaron 3,747.59 hectáreas de selva afectada:
- Quintana Roo: 2,531.12 ha
- Yucatán: 968.62 ha
- Campeche: 247.85 ha
De mayo a agosto, la Profepa ha realizado 25 operativos en la Península de Yucatán, que acumulan 6,325.60 hectáreas afectadas.
Acciones legales y coordinación
La procuradora federal, Mariana Boy Tamborrell, informó que además de las clausuras, se han iniciado procedimientos administrativos y se han presentado 13 denuncias penales.
“Tenemos el compromiso de trabajar en coordinación con instituciones de los tres niveles de gobierno para frenar los desmontes ilegales y lograr sanciones ejemplares contra quienes arrasan con la selva”, subrayó.
Asimismo, se anunció la integración de una Mesa de Combate a la Tala Ilegal y la Deforestación en Quintana Roo, con participación de autoridades ambientales y de seguridad, para frenar el avance de los cambios de uso de suelo clandestinos en la región.