Una profesora compartió en Instagram una fotografía de ella misma usando un bikini, al estar en su cuenta privada se sintió con la libertad y seguridad de hacerlo, sin pensar que sería el inicio de una ola de acoso en su contra.
La maestra de inglés en una escuela de Calcuta se sintió expuesta cuando un alumno de la Universidad San Xavier, el colegio en donde trabajaba, encontró las imágenes privadas de la profesora, las cuales fueron calificadas como “sexualmente explícitas” por parte del padre del alumno.
Lo que más le sorprendió a la docente fue que estuvieran en su poder, pues ella misma reveló que ya no estaban en su cuenta, sin embargo, la situación escaló aún más.
La profesora llegó a la facultad el 9 de agosto de 2021, dos meses después fue convocada en la oficina del rector para una reunión, posteriormente, un comité integrado por el vicecanciller de la universidad, Felix Raj, el secretario Ashish Mitra y cinco mujeres interrogó a la maestra.
El comité le informó que el padre de un estudiante presentó una denuncia en su contra, pues lo había encontrado observando sus fotografías en ropa interior, por lo que pidió a la universidad “salvar a su hijo de tanta vulgaridad“.
En la carta dirigida a la universidad, el padre escribió: “Ver a una profesora vestida en ropa interior subiendo fotos a las redes sociales es absolutamente vergonzoso para mí como padre, ya que he tratado de proteger a mi hijo de este tipo de indecencia grave y objetivación del cuerpo femenino”.
La exposición fue tal, que entre los presentes comenzaron a circular las fotografías de la profesora y se le pidió que confirmara que eran suyas, además de que la criticaron y avergonzaron por el tipo de imágenes.
Posteriormente, la docente de 31 años se sintió obligada a renunciar, únicamente porque un alumno encontró las fotografías en su perfil privado de Instagram, esto generó fuertes críticas hacia la universidad.
“Me dijeron que estaba trayendo desprestigio y vergüenza a la universidad. Me preguntaron si mis padres estaban en Instagram y si habían visto esas fotos. Me sentí traumatizada y con náuseas”
Por su parte, la escuela negó haberla forzado a renunciar, sin embargo, la joven, tras perder su trabajo, tuvo que regresar a casa de sus papás y pedir dinero prestado para ayudarle a su familia a pagar los medicamente de su padre.
En marzo pasado, la profesora envió una notificación a la universidad, en donde señaló las violaciones a las leyes laborales y de acoso sexual en el lugar del trabajo que vivió, asimismo, exigió una disculpa y salarios atrasados. Pero la respuesta no fue favorable, la universidad la amenazó con interponer una demanda por difamación de 12.5 millones de dólares.
Este caso causó una fuerte indignación, ya que la profesora, fue culpada pese haber sido la víctima, además de expuesta por imágenes que se encontraban en su perfil privado. De igual forma, el hecho de que los cuerpos y vidas de las mujeres siguen siendo vigiladas y criticadas por una sociedad machista.
En la India, siguen habiendo instituciones académicas en donde las estudiantes tienen que seguir estrictas normas en el código de vestimenta y atender toques de queda.