CIUDAD DE MÉXICO.-Alianza de Medios Mx, plataforma integrada por diversos medios de comunicación que defiende la libertad de expresión y combate la impunidad en los casos de ataques contra periodistas, denunció hoy que la violencia contra el gremio “no tiene precedente desde que existe un registro sistemático de estos crímenes en México”.
En un comunicado desplegado en distintos medios, incluida la Organización Editorial Mexicana, miembro activo de la Alianza de Medios MX, se señaló que el homicidio de comunicadores “no se trata de un daño colateral de los niveles de inseguridad en el país”.
“Puede presumirse que los autores materiales están ligados a bandas criminales, pero ante la ausencia de investigaciones eficaces, no se puede descartar el involucramiento de actores políticos locales o de otro género como autores intelectuales”, indica el desplegado.
El pronunciamiento se da luego de que esta semana fuera asesinado en Zitácuaro, Michoacán, el periodista Armando Linares, director del medio local Monitor Michoacán, siendo el octavo comunicador privado de la vida en lo que va del año según el conteo hecho por la plataforma.
“Al matar a periodistas se hiere de gravedad la vigencia de un derecho esencial en democracia, el de todo ciudadano a estar informado, conocer los desafíos que enfrenta como integrante de una comunidad, y tomar decisiones en su vida cotidiana. Los ataques contra periodistas lesionan la libertad de expresión de todos, una libertad cuya vigencia hace posible todas nuestras demás libertades”, agrega el desplegado.
Los medios de comunicación que integran la Alianza externaron que el asesinato de periodistas es la expresión más cruda que también se expresa en zonas de silencio, “porque medios e informadores deciden autocensurarse bajo amenazas encubiertas, sobre todo ante la certeza de saberse indefensos”.
La organización reconoció el ofrecimiento del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador de informar cada 15 días sobre el avance de las indagatorias en torno a los periodistas asesinados, pero consideró urgente fortalecer los mecanismos de protección establecidos tanto a nivel federal como estatal para evitar que estos crímenes continúen.
Consideró además que la estigmatización contra la prensa desde el poder –replicada ya en varios Estados–, para presentarla como adversaria de los gobernantes e, incluso, de la sociedad, afecta principios básicos de nuestra vida en democracia. “Y en el actual contexto de polarización política en el país, puede constituir una incitación a la violencia”, concluyó el conglomerado que agrupa a medios como El Universal, Proceso, La Silla Rota, la CIRT, Debate y Organización Editorial Mexicana, entre otros.
Sólo en lo que va del año ocho periodistas han sido asesinados: Lourdes Maldonado y Margarito Martínez, en Tijuana, Baja California; Heber López Cruz, en Salina Cruz, Oaxaca; Juan Carlos Muñiz, en Fresnillo, Zacatecas; Jorge Camero Zazueta, en Empalme, Sonora; Roberto Toledo, en Zitácuaro, Michoacán; José Luis Gamboa, en Veracruz, Veracruz y Armando Linares, en Zitácuaro, Michoacán.
Fuente: El Sol de México