El registro de candidatos a los Municipios de Quintana Roo provocó el descontento de los sectores militantes que perdieron, como no podía ser de otra manera, y de buena parte de la opinión pública y de muchos ciudadanos decepcionados por la magra cualidad de los aspirantes, y por un proceso electoral donde la alternativa del partido de la regeneración moral de la vida pública del país, el Morena, del presidente de la República, se ha diluido como posibilidad de solución de los graves problemas municipales y de representación efectiva de los intereses populares, y no presenta ya ningún rasgo distintivo de valor que lo haga más meritorio que sus aliados o sus adversarios, aunque dicho partido y sus alianzas tengan más opciones de victoria que los opositores –incluso en las demarcaciones donde tan mal han gobernado y tantas evidencias de corrupción identifican su paso por ellas-, gracias sólo a su filiación partidaria con el presidente, cuya invicta popularidad, en un país de fervorosos creyentes, favorece su propia propaganda. Porque pese a las iniciativas y el discurso del liderazgo presidencial contra la corrupción, los hechos de la corrupción, y de la ineptitud gobernante y representativa, de quienes sin mérito ninguno llegaron al poder montados en el victorioso carro electoral lópezobradorista hace tres años, siguen siendo más objetivos que nunca en el Congreso local y los Cabildos que controlan, como morenistas o asociados con partidos peores. Hoy día, con ellos y sin ellos la violencia no deja de imponer sus fueros, el endeudamiento y el déficit fiscal crecen como nunca, la marginalidad consume a las urbes turísticas más ricas, las municipalidades más pobres siguen siendo más pobres, la destrucción ambiental arrasa sin contenciones de autoridad de ninguna especie, y el ejercicio legislativo sigue siendo uno de los más costosos e improductivos del país y del mundo. Y Mara Lezama y Laura Beristáin son candidatas a reelegirse en sus Ayuntamientos, la delincuencia política de su partido y sus alianzas puede seguir ganando en Puerto Morelos, Tulum y Othón P. Blanco, y todo seguirá igual o peor en todas partes donde sus partidos ganen, o donde lo hagan el PRI, el PRD, el PAN y sus pequeñas franquicias cómplices, llámense sus candidatos Jesús Pool, José Contreras Méndez, Víctor Mas, Sofía Alcocer, Nivardo Mena o Pedro Joaquín. El próximo 6 de junio, gane quien gane, los quintanarroenses terminarán perdiendo.
Javier Ramírez
Las dos principales coaliciones finalmente registraron a sus candidatos para las once Presidencias Municipales de la entidad, tras un proceso de selección que en muchos casos terminó por dividir a la militancia, que denunció imposiciones o falsos resultados en las encuestas que los partidos mandaron a hacer.
Las inconformidades se dieron más en el lado del partido presidencial y a vencer en el país, el Movimiento Regeneración Nacional (Morena), y principalmente en los Municipios de Benito Juárez y Othón P. Blanco, donde debido a los malos resultados de sus actuales administraciones muchos buscaban un cambio, uno más congruente con los principios del programa de la llamada ‘cuarta transformación’ del país y que de manera coloquial su líder máximo sintetiza en la proclama, convertida en guía ética, de “no robar, no traicionar y no mentir”.
Aunque siguen dándose cambios de último minuto, debido a la normatividad ‘de género’ (conquista feminista según la cual las virtudes representativas dependen de la paridad numérica entre hombres y mujeres), los aspirantes comienzan a prepararse para los comicios más importantes, de cara a los que vendrán el próximo año, en los que estará en juego la gubernatura y el Congreso del Estado.
Listas finales de candidatos
El pasado 8 de marzo fue la fecha límite para que las coaliciones, partidos políticos y aspirantes independientes concluyeran sus registros ante el Instituto Electoral de Quintana Roo (Ieqroo) para las once Presidencias Municipales. Una vez concluida esta parte, el Instituto comenzó con la revisión de las planillas para detectar errores que deberán ser solventados antes del 19 de marzo, fecha en la que iniciará la etapa de campañas.
Como en gran parte del país, en Quintana Roo son dos las principales coaliciones que participarán en estos comicios: “Juntos haremos historia por Quintana Roo”, del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Movimiento Auténtico Social (MAS) y los partidos Verde Ecologista de México (PVEM) y del Trabajo (PT), así como “Va por Quintana Roo”, integrada por los partidos Acción Nacional (PAN), Revolucionario Institucional (PRI), de la Revolución Democrática (PRD) y Confianza por Quintana Roo (CPQ).
Las listas de candidaturas quedaron de la siguiente manera:
“Juntos haremos historia por Quintana Roo”
Morena: Mara Lezama en Benito Juárez, Laura Beristáin en Solidaridad, Luis Gamero en Othón P. Blanco, Juanita Alonso en Cozumel, Marciano Dzul en Tulum, Fernando Bacelis en Isla Mujeres, y María Hernández en Felipe Carrillo Puerto.
PVEM: Blanca Merari Tziu Muñoz en Puerto Morelos.
PT: Trinidad Guillén en Bacalar.
MAS: Trinidad García en Lázaro Cárdenas, y Jorge Martín Angulo en José María Morelos.
Sin embargo, la lista del MAS ha tenido cambios de último minuto debido a limitantes de ‘paridad de género’. De esta manera, las candidaturas de Lázaro Cárdenas y José María Morelos fueron entregadas a Orlando Bellos Tun y Teresita de Jesús Hernández.
“Va por Quintana Roo”
PAN: Juan Ortiz Cardín en Othón P. Blanco, Lily Campos Miranda en Solidaridad, Atenea Gómez Ricalde en Isla Mujeres, Rosy García en Puerto Morelos, y Nivardo Mena Villanueva en Lázaro Cárdenas.
PRI: Paoly Perera, sin coalición, en Felipe Carrillo Puerto, y en coalición, en Bacalar y Cozumel, con José Alfredo Contreras Méndez y Pedro Joaquín Delbouis, respectivamente.
PRD: Jesús Pool en Benito Juárez, Víctor Mas en Tulum, y Sofía Alcocer en José María Morelos.
CPQ: Sólo tendrá candidatos a regidores.
División en el Morena
Estos anuncios molestaron a los aspirantes perdedores, entre ellos la senadora Marybel Villegas Canché, quien aseguró que se cometió un “atropello en el proceso interno de Morena”, al designar la candidatura de Benito Juárez con base en una encuesta a la que ella no tuvo acceso.
Tras afirmar que impugnaría el proceso para que se repusiera y se aclarase el método de selección de candidatos, advirtió que no aceptará “que se use a Quintana Roo como carta nacional de negociación para ceder intereses al Partido Verde, un partido que ha establecido en nuestro Estado un grupo de intereses creados, lo más parecido a una mafia para conservar los privilegios y los negocios al amparo del poder público”.
En ese sentido, acusó a los dirigentes del PVEM de haber hecho mucho daño a los quintanarroenses y que en vez de ser premiados deberían ser castigados por su corrupción.
Como es bien sabido, la actual alcaldesa de Benito Juárez, Mara Lezama Espinosa, ha sido socia y protectora de los intereses que el PVEM mantiene en esa demarcación, al respetar varios convenios leoninos que su antecesor, Remberto Estrada Barba, signó antes de dejarle el cargo.
Pese a que Villegas Canché aprobó como diputada local los desfalcos de Roberto Borge y la concesión de Aguakán en el norte de la entidad, cuenta con el apoyo de una buena parte de militantes morenistas, por lo que este resultado podría ser contraproducente para el partido, donde muchos no ven con buena cara los líos en que Mara Lezama ha metido al Ayuntamiento benitojuarense con sus negocios privados y sus desfalcos al erario.
Un caso similar se vive en Othón P. Blanco, donde otros tantos morenistas protestaron por la candidatura de Luis Gamero, expanista de conocida reputación y exbrazo derecho del actual y nada solvente alcalde Otoniel Segovia, quien hoy por hoy encabeza la peor administración municipal que la capital del Estado haya tenido. Consideran que una victoria de su exsecretario particular significará darle continuidad al mal gobierno, además de que el ahora candidato ya dio muestras de nepotismo al colocar como su sustituto dentro de su planilla a su actual pareja, Arturo Ortiz Soberanis.
Actualmente, con la polémica que ha generado la próxima demolición del llamado ‘Mercado Nuevo’ de Chetumal como parte de un proyecto de remodelación, decenas de locatarios han iniciado protestas, asegurando que esta vez no votarán por el Morena, para demostrar su rechazo a la administración de Segovia Martínez.
De acuerdo con militantes, la dirigencia del Morena estaría “jugando a perder en la capital del Estado”. En ese sentido, el secretario general Jorge Parra Moguel, esposo de Marybel Villegas, aceptó que existe rechazo en todos los Municipios, pero consideró que es algo normal y que corresponderá a los hoy candidatos sumar a los inconformes. Mientras tanto, en la otra coalición, las disputas han sido mucho menores. El PRI, el PAN y el resto de sus aliados han salido prácticamente libres de controversias, aunque los pobres resultados en muchos de los Ayuntamientos donde gobiernan, así como la reciente negativa por parte de sus legisladores locales de aprobar la despenalización del aborto, seguramente habrá de pasarles factura.