Jugadores del club de Futbol femenil “Las Santas” denunciaron a los dueños del equipo de sexualizarlas, a tal grado de obligarlas a usar diminutos shorts en los partidos y entrenamientos, que muy poco dejan a la imaginación.
Cuatro de estas mujeres fueron despedidas por quejarse al respecto, mientras que las otras tuvieron que aceptar las nuevas reglas de vestimenta.
Todo inició cuando los hermanos , Alejandro y Juan Felipe Duque, decidieron comprar el equipo Las Santas, con el objetivo de replicar el éxito obtenido con “Las Divas”, es decir, contratando a jugadoras voluptuosas y de “buena imagen”, a quienes también vestían con diminutos conjuntos, para atraer a patrocinadores y aficionados.
Esa fórmula ya les había resultado con Las Divas, y por eso decidieron hacer lo mismo con su nuevo equipo, fichando además a su antigua estrella, Mónica Vallejo, una influencer quien precisamente se había hecho famosa en esa liga de futbol de Colombia de la mano de los hermanos Alejandro y Juan Felipe.
Pero no todas las futbolistas estuvieron de acuerdo. Las quejosas, Luisa, María y Galiena, reclamaron sentirse avergonzadas con el nuevo uniforme, además de que las filmaban casi en todos los entrenamientos con el fin de exhibirlas como “mercancía sexual”. Pidieron a la directiva que sea voluntario el portar esos uniformes, pero en respuesta fueron despedidas.
Los hermanos Duqué por su parte se defendieron señalando que gracias a su fórmula, dicha liga colombiana compite con la afición de la Premier Varonil en fama, además de que han logrado que cinco de sus jugadoras se conviertan en influencers exitosas.
También señalaron que mientras que otros clubes pagan un aproximado de 25 dólares a la semana a sus jugadoras, ellos les pagan cerca de 300 dólares semanales a “las menos famosas”, y entre 500 y 2 mil dólares a las que tienen más éxito.
Como sea, este punto ya abrió un debate y se han organizado peticiones para regularizar la sexualización de las mujeres en las ligas de fútbol de Colombia.