Adolescentes que le prendieron fuego a un niño de origen Otomí, ya fueron vinculados a proceso en la espera del cierre de la investigación.
Los hechos ocurrieron en la escuela telesecundaria Josefa Vargas, en el Salitre, Querétaro.
De acuerdo con las investigaciones la víctima Juan Pablo “N” fue acosado durante meses por ser de origen Otomí y no dominar el idioma español.
Aunque los padres del menor pidieron a las autoridades escolares tomar cartas en el asunto, estas desestimaron el asunto y luego sucedió la tragedia.
La agresión ocurrió el pasado 6 de junio, los dos adolescentes, de identidad reservada, rociaron a Juan Pablo con alcohol y luego le prendieron fuego, ocasionándole quemaduras de segundo y tercer grado.
El 7 de junio los padres de la víctima acudieron a realizar su denuncia penal a la Fiscalía General del Estado de Querétaro.
Al ser menores de edad la Unidad Especializada en Justicia para los Adolescentes fue la encargada de llevar el caso; con las primeras pruebas obtenidas hoy 24 de junio los agresores fueron llevados a una audiencia inicial.
Los menores fueron vinculados a proceso pero al tener 13 años no podrán ingresar al entro de Internamiento y Ejecución de Medidas para Adolescentes (CIEMA), así que pasaran su proceso en libertad.
“En adolescentes, más que pensar en una sanción de tipo represivo, tendríamos que pensar en cómo apoyar a los adolescentes y ayudarles en ese proceso de formación y de desarrollo” dijo Mariela Ponce Villa.
Los padres de Juan Pablo denunciaron que hasta la maestra le hacía bullying
Juan Zambrano padre del menor señaló que Gricelda Quiterio Mendoza, directora de la telesecundaria, sabía desde febrero pasado que su hijo sufría discriminación y bullying por parte de sus compañeros y de la maestra por su origen étnico.
“Desde aquellos tiempos ya le estaban haciendo bullying y nos dimos cuenta que hasta la propia maestra le hacía bullying; nada más porque somos de raza otomí, piensa ella que no somos de su clase, no somos de su raza” mencionó el padre.