Desde temprana hora de este 4 de junio, los diferentes puntos modelo que operan bajo el esquema de venta a automóviles comenzaron a vender cerveza en la capital del Estado.
Con precios regulares y la condición de solamente vender dos planchas por automóvil, todo venía sucediendo con normalidad.
Sin embargo, la situación se salió de control cuando comenzaron a querer ingresar al lugar personas “a pie”, sin respetar su sana distancia.
Ante la aglomeración de estos compradores, algunos puntos Modelo decidieron cerrar sus cortinas por el temor a ser clausurados.
Mientras que la sucursal que se encuentra en la Calzada Veracruz fue custodiada por elementos de la Policía de Quintana Roo.