Jennette McCurdy y Ariana Grande aparentaban tener una gran amistad, al menos eso era lo que demostraban en la pantalla, ya que en la vida real la relación de ambas famosas era sumamente complicada, esto de acuerdo con lo escrito por la intérprete de Sam Pockett en su libro “I’m glad my mom died”.
Según McCurdy, la convivencia con Grande era tóxica para ella, incluso, admitió haber sentido celos luego de que la carrera de la cantante despuntara pues la producción de la serie “Sam &Cat”, que ambas protagonizaban, tenía preferencias por la pelirroja, tanto así que ella debía cubrir sus faltas cuando ésta se encontraba de gira, algo que entorpeció su carrera:
“La semana en la que me dijeron que Ariana no estaría en la serie y que justificarían su ausencia en los episodios fingiendo que su personaje estaba encerrado en una caja. Pensé: ‘¿Estás bromeando? ¿Bromeando en serio? ¿Así que tengo que rechazar películas mientras Ariana está fuera cantando en los Billboard Music Awards? Que se joda eso'”, escribió.
Pero lo que desató la furia de Jennette fue un día que Ariana llegó al set y le contó que la noche anterior había pasado una gran velada en casa del actor Tom Hanks:
“Ariana entró silbando de emoción porque había pasado la noche anterior jugando en la casa de Tom Hanks. Ese fue el momento en que me quebré. No podía soportarlo más. Actuaciones musicales y portadas de revistas… lo que sea, lo superaré. Pero ¿jugar de forma familiar en el National Treasure, la casa de Tom Hanks, dos veces ganador del Premio de la Academia y seis veces nominado? No podía soportarlo”, agregó.
La exactriz agregó que desde ese momento cualquier intento porque la intérprete de “Thank you next” le agradara fue en vano, pues cada falta o cada experiencia que vivía y que contaba en los foros lo sentía como un ataque personal:
“Nunca me agradó. No podía agradarme. El éxito de una estrella pop podía manejarlo, pero ¿pasar el rato con el sheriff Woody, con Forrest Gump? Esto ha ido demasiado lejos. Así que ahora, cada vez que falta al trabajo, se siente como un ataque personal. Cada vez que le sucede algo emocionante, siento que ella me priva de tener esa experiencia”.
Jennette también expresó que espera que Ariana alguna vez lea su libro, no sólo para que se entere de todo lo que pasó y la llevó a sentir una gran antipatía por ella, también porque considera que será una lectura bastante entretenida.