MOSCÚ.- Este jueves, el presidente ruso Vladímir Putin dijo que el mundo afronta el decenio “más peligroso e impredecible” desde la Segunda Guerra Mundial.
“El mundo se encuentra en un punto de inflexión histórico, le espera el decenio más peligroso e impredecible desde los tiempos de la Segunda Guerra Mundial”, dijo el jefe del Kremlin al intervenir en la XIX sesión plenaria del club de debate Valdái.
Durante su intervención, que se prolongó por más de media hora y continuó con una sesión de preguntas, el líder ruso no escatimó palabras en criticar a Occidente y el mundo unipolar, que ha llegado a su fin, dijo.
“El que siembra viento, cosecha tempestades”, advirtió.
Con todo, los países occidentales, agregó Putin, tendrán que comenzar a hablar “en condición de igualdad” con el resto del mundo sobre “un futuro común”.
“Y cuanto antes lo hagan, mejor”, aseveró.
Según Putin, Rusia como “una civilización independiente y única, nunca se ha considerado y ni se considera enemiga de Occidente”.
Tampoco está “desafiando a las élites occidentales” ni quiere ocupar el lugar de “potencia hegemónica” en el nuevo orden mundial, dijo.
“Rusia no propone reemplazar la unipolaridad con la bipolaridad, la tripolaridad. Sustituir el dominio de Occidente por el dominio del Este, Norte o Sur, esto conduciría inevitablemente a un nuevo callejón sin salida”, opinó.
Asimismo, abogó por reflejar la diversidad del mundo en las estructuras de la ONU, incluido el Consejo de Seguridad.
“Posiblemente, hay que pensar en que la estructura de la ONU y el Consejo de Seguridad reflejen mejor la diversidad de las regiones del mundo”, señaló.
En este sentido, agregó que “mañana, de países de Asia, África, América Latina dependerá mucho más de lo que se cree hoy día”.
“El aumento de su influencia, sin duda, es positivo”, dijo.
Así también, Vladímir Putin, llamó al Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) a inspeccionar “lo antes posible” las instalaciones nucleares de Ucrania tras denunciar supuestos planes ucranianos de utilizar una “bomba sucia”.
“Nosotros estamos a favor. Y que lo hagan cuanto antes y de la forma más amplia posible, ya que sabemos que ahora Kiev hace todo lo posible para borrar los indicios de esos planes. Están trabajando en ello”, dijo Putin durante el plenario del Club de debate de Valdái, donde suele reunirse con políticos y medios extranjeros.
Putin aseguró saber “aproximadamente” dónde los ucranianos están fabricando ese tipo de bomba, que no es atómica pero que incluye elementos radiactivos.
“El restante combustible nuclear ha sido ligeramente modificado. La tecnología que existe en Ucrania permite hacerlo”, señaló.
Reconoció que fue él quien ordenó al ministro de Defensa, Serguéi Shoigú, informar a sus colegas de los principales países del mundo sobre los descubrimientos de los servicios secretos rusos.
“No podemos ignorar cosas como esa”, señaló.
A petición de Kiev, que negó rotundamente dichos planes, el OIEA anunció esta semana que enviará una misión para inspeccionar las instalaciones nucleares del país.
A su vez, Putin aseguró que para Moscú no tiene sentido ni militar ni político emplear una bomba sucia contra Ucrania en el marco de su actual campaña militar.
“Nosotros nunca hemos hablado directamente sobre el posible empleo por parte de Rusia de armamento nuclear. Sólo respondimos a las declaraciones realizadas por los líderes de los países occidentales”, señaló.
Calificó de “primitivo” el chantaje nuclear de Occidente dirigido a presionar a los países amigos del Kremlin y también a los neutrales, y subrayó que Rusia sólo recurrirá a ese arsenal estratégico para defender su territorio y a su pueblo.
“Mientras existan las armas nucleares, siempre existiría el peligro de su uso”, admitió.
“Los dirigentes del régimen de Kiev hablan constantemente acerca de su aspiración de poseer armas nucleares”, añadió.
Finalmente, recordó que Estados Unidos es el único país que ha utilizado la bomba atómica contra un país no nuclear, como ocurrió en agosto de 1945 en las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki.
Fuente: El Sol de México