Un joven de de 24 años de edad se salvó de ser linchado, pero no de pasar sus horas de arresto en la cárcel al ser descubierto acechando a su vecina en su casa de la calle 38 entre 65 y 67 de la colonia Santo Domingo.
El detenido, identificado como Cristian Sebastián “N”, fue sometido y amarrado por los familiares de la mujer identificada como J.P.D., quien lo descubrió acechando en su ventana a eso de la 1 de la madrugada del jueves.
La mujer se encontraba acostada dispuesta a descansar y de pronto escuchó que le golpearon su ventana. Su pequeño hijo, al ver al individuo, se puso a llorar, lo que la motivó a que buscara la ayuda de sus familiares que viven cerca del predio, entre ellos su padre F.P.B. y entre todos lograron someter al intruso, al que amarraron de las manos mientras esperaban la llegada de la Policía Municipal de Tizimín.
Al llegar los oficiales le entregaron al detenido y los quejosos dijeron que únicamente pedían que se le castigara con pasar sus horas respectivas en las celdas, pues además estaba en completo estado de ebriedad.
El sujeto presentaba algunas lesiones leves en el cuerpo, lo que hace suponer que antes de ingresar sin autorización al predio donde fue sorprendido, se habría caído en algún otro lugar.
El detenido confesó su fechoría señalando que no aguantó la tentación “porque su vecina está muy rica”.