GUADALAJARA.- Emboscadas y enfrentamientos de civiles armados contra personal de la Guardia Nacional, y de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en la zona limítrofe de Jalisco y Michoacán dejaron al menos seis uniformados muertos y cuatro presuntos participantes detenidos.
Según las investigaciones, la jornada violenta fue ordenada por Heraclio Guerrero Martínez, ‘El Tío Lako’, quien integra el primer círculo del CJNG, y controla la región entre los tres estados.
En la localidad de Guadalupe de Lerma, Jalisco, fueron victimados dos elementos de la Guardia Nacional, adscritos a la división de seguridad en carreteras, estaban a bordo de su patrulla.
La otra agresión se verificó sobre la carretera Chilchota-Zamora, donde un camión militar quedó varado con las llantas desinfladas que pasaron por matatenas con puntas metálicas, arrojadas por los delincuentes. Los soldados bajaron del vehículo para repararlo cuando fueron emboscados por sujetos armados; el saldo es de cinco elementos muertos y cuatro lesionados de consideración.
Tras los ataques, con la llegada de refuerzos, Guardia Nacional y Sedena emprendieron operativos en La Barca y Ocotlán en terrenos de Jalisco, y sobre una brecha de la localidad de Poncitlán, se detectó a cuatro sujetos armados a bordo de una camioneta Cherokee de reciente modelo, y los oficiales los interceptaron para hacerles una revisión preventiva, y les aseguraron un arsenal consistente en cuatro armas largas, entre ellas dos ametralladoras Minimi, un fusil de asalto AK-47 y un fusil Barret calibre .50, además de tres armas cortas calibre 9 mm.
Los sujetos portaban chalecos antibalas con las leyendas “Fuerzas Especiales el Tío Lako” y “FF. equipo Cannabis C11”, que los identifica como integrantes de una de célula delictiva, encabezada por el apodado como “El Tío Laco”, identificado como uno de los hombres más cercanos a Nemesio Oseguera Cervantes, ‘El Mencho’, líder y fundador del Cártel Jalisco Nueva Generación.
Los ataques habrían sido dirigidos personalmente por Jesús Rivera Aguirre, conocido como ‘Don Chuy’, quien es identificado como un cabecilla con del Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) y que se encuentra libre tras haber sido detenido el 25 de febrero pasado, cerca de una estación de gasolina en Zacapu, Michoacán.
Su captura desató una serie de enfrentamientos armados y narcobloqueos en diversas partes de la localidad, y en su momento, tres oficiales resultaron heridos. Además, se registraron bloqueos en las carreteras hacia Morelia y el incendio de vehículos en puntos estratégicos; y hasta se suspendieron clases en el municipio, como medida de precaución.
Su liberación fue determinada por el juez Rubén García Mateos, quien decidió no vincularlo a proceso, por deficiencias al debido proceso.
Por su parte, el gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, dijo que los ataques a integrantes de la Guardia Nacional y militares fueron perpetrados por ‘Don Chuy’, a quienes responsabiliza por presuntas operaciones de drogas y armas en el llamado ‘Corredor de la Muerte’, en los límites de Jalisco, y Michoacán, y la confluencia de ambas entidades con Guanajuato.
Fuente: El Financiero