Claudia y las malas compañías

4

Signos

Dice la Presidenta que los opositores (#AstilleroInforma) “quieren que le vaya mal a México, que fracase el Gobierno de la 4T”.

Pero no se tiene que ser opositor o seguidor para defender una lógica distinta de sus generalizaciones equívocas.

Hay quienes quieren que entre unos delincuentes políticos y otros (socios inocultables del crimen organizado, como Gobernadores y exGobernadores) dejen, ella y su Gobierno, de tomar partido, defendiendo un soberanismo patriotero que más que del Estado nacional parece de personajes y grupos de poder que se escudan ahora de sus fechorías como militantes de la pureza obradorista.

Sus nombres, sus historias y las evidencias en torno suyo son tan ilustrativos como la defensa redundante que la Presidenta y sus voceros y correligionarios más incondicionales y mediáticos hacen de ellos.

No hay culpables políticos importantes de nada, mientras las noticias sobre las actividades del crimen organizado se multiplican en torno suyo.

Calderón es culpable por los actos de su jefe de Seguridad pero Adán Augusto no por los del suyo.

¿Va por ahí la regeneración moral y el deseo de que aceptando complicidades criminales de la dirigencia superior del Estado mexicano le vaya bien a México?

SM

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *