
WASHINGTON.- Estados Unidos incrementó su presión contra Venezuela al imponer sanciones a 10 personas y entidades de Venezuela e Irán, a las que acusa de participar en el comercio de drones entre ambos países, así como en el desarrollo del programa de misiles iraní y en la adquisición de sustancias químicas para misiles balísticos.
El Departamento del Tesoro estadunidense informó que estas acciones buscan frenar la “propagación imprudente de armas mortales” por parte de ambos gobiernos. El subsecretario de Terrorismo e Inteligencia Financiera, John Hurley, afirmó que Washington seguirá actuando para impedir que el complejo militar-industrial iraní utilice el sistema financiero de Estados Unidos.
Según el Tesoro, los drones y el programa balístico iraní representan una amenaza directa para Estados Unidos y sus aliados en Medio Oriente, además de desestabilizar el comercio marítimo en el mar Rojo.
Entre los sancionados se encuentra la Empresa Aeronáutica Nacional de Venezuela y su presidente, José Jesús Urdaneta, así como tres ciudadanos iraníes señalados por su participación en la obtención de insumos químicos para misiles balísticos. También fueron castigadas varias personas y compañías con sede en Irán vinculadas al Rayan Fan Group, previamente sancionado por Washington.
El Departamento de Estado aseguró que la empresa venezolana adquirió drones iraníes y advirtió que la provisión de armamento convencional de Irán a Caracas constituye una amenaza para los intereses de Estados Unidos en la región.
En este contexto, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, acusó a Venezuela e Irán de “exportar terrorismo” al hemisferio occidental, aunque no presentó pruebas que respalden sus afirmaciones.
De manera paralela, el diario The New York Times informó que la Agencia Central de Inteligencia (CIA) habría realizado un ataque con drones en un puerto venezolano la semana pasada. La información coincide con reportes previos de CNN y con declaraciones del presidente Donald Trump, quien afirmó haber destruido un muelle utilizado presuntamente para el tráfico de drogas, sin precisar detalles.
Hasta el momento, el gobierno de Venezuela no ha respondido a las declaraciones de Trump ni a los reportes de medios estadunidenses.
Por su parte, el Comando Sur de Estados Unidos indicó en la red social X que está preparado para apoyar con capacidades marítimas especializadas a operaciones del Departamento de Seguridad Nacional y del Departamento de Justicia, aunque sin ofrecer mayores detalles.
En Colombia, el diario El Espectador documentó un ataque del Pentágono contra una lancha supuestamente vinculada al narcotráfico, en el que aparecieron cuerpos calcinados y restos de una embarcación destruida. Un análisis posterior del New York Times relacionó ese ataque con un video difundido por el secretario de Guerra de Estados Unidos, Pete Hegseth.
Al respecto, el presidente colombiano Gustavo Petro criticó las acciones militares y afirmó que varias de las embarcaciones atacadas transportaban cannabis y no cocaína, cuestionando la efectividad y legalidad de dichas operaciones.