Gabriel Henrique Alves Coelho se apareció a fuera de la casa de su exnovia, la obligó a golpes a subirse a su carro para torturarla, violarla y luego marcarla con su nombre.
El hecho se registró el pasado viernes 20 de mayo en Sao Paulo, Brasil. Gabriel no superaba que la víctima, Tayane Caldas, de 16 años, hubiera terminado con él.
El agresor tenía una orden de restricción, pero eso no evitó que él la privara de la libertad.
La tuvo encerrada en su casa, la ató, la golpeó y la torturó, incluso le tatuó la cara con su nombre, como si se tratara de su ganado.
Tayane relató a la policía que entre lagrimas le pidió no hacerlo:
«Le pedí que no lo hiciera porque destruiría mi vida y me dijo que de todos modos lo haría. Mientras gritaba, me golpeó. Sólo vi el tatuaje terminado después y lo único que pude hacer fue llorar», relató.
«Cuando miré, ya no era yo. No soy yo con esto aquí. A mí me mató por dentro. Me remató al marcarme, como si fuera de su propiedad».
La policía detuvo infraganti a Gabriel, de 20 años, por incumplir la restricción que le impedía acercarse a la joven. A pesar de que se comprobó agresión y secuestro, pasará solo seis meses en la cárcel, porque una jueza determinó que su juicio se vio afectado por la tristeza de haber sido terminado.