Raúl es un joven que se ha hecho viral en las últimas horas, por retar a la lógica y usar el “ingenio mexicano” para transportar arriba de su Tsuru su televisión de 65 pulgadas recién comprada, aunque el final no fue el esperado.
A través de un video el muchacho, emocionado, contó que recién había adquirido en un Elektra de Nogales, Sonora. Lo que no contaba era con que no cabría en su automóvil.
“Joaquín (su compañero) duda en que cómo la vamos a llevar si no tenemos cuerda para amarrarla. No es mexicano, es gringo, porque duda de nuestro ingenio”, detalla Raúl, al tiempo en que explicaba que la iba a sostener en la parte de arriba de su Tsuru, sosteniéndola solo con un brazo, mientras que con el otro que manejaba y realizaba los cambios.
“¿Y porqué no se pararon en una tienda para comprar mecate y amarrarla?”, le cuestionaron algunos usuarios al escuchar que a mitad del camino Raúl se quejó de que se había cansado su mano.
Después el muchacho respondería que no pensó claro, pues estaba emocionado de haber comprado una tele que tiene un precio mayor al de su carro.
Por fin, tras casi 40 minutos de viaje, logró llegar a su casa. Se apresuró a desarmarla cuando se dio cuenta de que por el trayecto, se había quebrado la pantalla, por los movimientos bruscos y fuerza que ejercieron sobre la misma en el viaje, debido a que el viento casi se la llevaba en varias ocasiones.
Decepcionado pero aún alegre, Raúl platicó que intentó aplicar la garantía en Elektra, pero le respondieron que al tratarse de una falla por golpe no se podría aplicar. En un taller de electrónica le explicaron que por la marca de la pantalla, TLC, era muy difícil conseguir la pieza de cambio, además de que le saldría en casi 5 mil pesos.
Afortunadamente, después de que su historia se hiciera viral, una persona se ofreció a regalarle una pantalla que ya no usaba… una televisión Samsung de 75 pultadas 4k, que cuesta cuatro veces la que rompió.
Ahora ya está completamente feliz.