Signos
Legión de candidatos a todo. Cero expedientes de valor político y administrativo. Discursos de mudos y disléxicos. Olvido absoluto y ominoso del historial de corrupción de candidatas representativas del movimiento partidista de la regeneración moral del país, como las contendientes a los Ayuntamientos de Cancún y Playa del Carmen (Mara Lezama, Marybel Villegas y Laura Beristáin), y su socia política del Verde y alcaldesa de Puerto Morelos, Laura Fernández, aspirante a la Legislatura federal.
Analfabetismo funcional, incompetencia conceptual y propositiva, ausencia del mínimo proyecto de mandato, nulos perfiles representativos y de liderazgo popular; y, en tales condiciones de humareda, nadería y ausencia viva de conciencia crítica, como casi nunca en la historia de las contiendas electorales, el análisis se queda sin más materia que esa, la de lo inasible del mérito; la de la banalidad igualitaria entre los bandos; la de la inequívoca certeza de que del lado de la regeneración moral estarán la mayoría de los ganadores empujados -a pesar de ser tan pérfidos e incompetentes como sus contrarios- por la noción masiva y fanática de que su militancia en el lópezobradorismo los purifica y los hace buenos o menos malos.
‘Miseria y nada más, dirán al verles’, bufaría el poeta viendo pasar el desfile de mediocres y codiciosos aspirantes a algo en el estercolero de la democracia perdida.
SM