CIUDAD DE MÉXICO.- Tras la muerte de 38 migrantes y más de 20 heridos tras el incendio en una estación migratoria en Ciudad Juárez, Chihuahua, el presidente Andrés Manuel López Obrador garantizó que no habrá impunidad en el caso y no se protegerá a nadie, por lo que se le fincarán cargos a los responsables de esta tragedia.
“Se están haciendo todas las investigaciones para conocer lo que realmente sucedió, hay versiones, tenemos ya una información preliminar, pero queremos tener todos los elementos para informar y no haya impunidad, que se aclare bien quiénes fueron los responsables, se finquen de manera específica las responsabilidades conforme a la ley a quienes hayan causado esta dolorosa tragedia”, dijo al inicio de su mañanera del 29 de marzo.
Envió sus condolencias a los familiares de los migrantes que fallecieron, los cuales en su mayoría son de Guatemala y Honduras, así como a los gobiernos de los países de donde eran originarios.
“Mi más profundo pésame a familiares de los hermanos venezolanos, guatemaltecos, ecuatorianos, colombianos y a los gobiernos de estos países”, dijo el presidente y aseguró que no se ocultará nada, por lo que hoy la secretaria de Seguridad, Rosa Icela Rodríguez, dará a conocer más detalles acerca de los hechos ocurridos la noche del 27 de marzo.
El presidente López Obrador dijo que la Fiscalía General de la República está a cargo de las investigaciones a través de un delegado en Chihuahua, sin embargo, pidió a Alejandro Gertz Manero atender de manera directa el caso en el que al menos 38 migrantes murieron en el incendio.
Agregó que en el avance de las investigaciones se desprende que hubo dolo y negligencia que llevó a la muerte de los migrantes y a que otro grupo resultara herido por el incendio, pero dijo que aún deben conocer bien qué fue lo que sucedió.
El presidente dijo que en la estación migratoria de Ciudad Juárez había personal del Instituto Nacional de Migración y también de una empresa de seguridad con la cual se tenía contrato.
Fuente: Excélsior