
CIUDAD DE MÉXICO.- La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) advirtió que el incremento de impuestos estatales —especialmente del Impuesto Sobre Nómina (ISN)— está debilitando la competitividad regional y frenando el crecimiento de las MiPyMEs, así como de empresas medianas y grandes que operan en mercados altamente competitivos. La organización empresarial señaló que el aumento de la carga fiscal podría incluso influir en decisiones de inversión entre estados o frente a otros países.
El organismo subrayó que ningún gobierno estatal debería avanzar hacia nuevos gravámenes sin garantizar previamente transparencia, eficiencia en el gasto, inversión en infraestructura estratégica y un entorno que proporcione seguridad, abastecimiento energético y certeza jurídica para sostener empleo formal.
Los incrementos fueron detectados en el análisis de los Paquetes Fiscales 2026 de las entidades federativas, donde se impulsan alzas al ISN, aumentos a impuestos locales e incluso nuevas contribuciones que afectan directamente la operación empresarial y la creación de empleo.
Coparmex señaló que los estados enfrentan presión financiera derivada de recortes federales y nuevas responsabilidades transferidas desde la Federación, lo que ha llevado a los gobiernos locales a buscar fuentes adicionales de recaudación. Sin embargo, advirtió que esta estrategia se está aplicando sin evaluar el impacto económico ni la eficiencia del gasto público.
De acuerdo con un sondeo entre los 71 Centros Empresariales del país, se han presentado 31 paquetes económicos estatales, muchos de ellos con ajustes fiscales. En el caso del Impuesto Sobre Nómina, se identificaron incrementos en Baja California Sur, Campeche, Chihuahua, Colima, Nuevo León y Yucatán, con alzas de entre uno y dos puntos porcentuales. Además, en Sinaloa se alerta sobre incrementos al predial que podrían elevarse hasta 4 % en municipios como Ahome.
Otros estados —como Guanajuato, Guerrero, Hidalgo, Jalisco, Estado de México, Morelos, Oaxaca, Quintana Roo, Sinaloa y Veracruz— mantienen estable su ISN, pero aplican nuevos derechos, contribuciones o cargas administrativas que también afectan la actividad económica. En Quintana Roo, por ejemplo, aunque la tasa no cambia, persisten obligaciones adicionales como el VISITAX, que repercute en la operación del sector turístico y empresarial.
El organismo reiteró que el ISN es uno de los impuestos más lesivos para el empleo formal. Cita como ejemplo el caso de Nuevo León, donde estudios empresariales advierten que una subida impactaría al 94.2% de las MiPyMEs, con un incremento promedio de 6.6% en sus costos, obligando a muchas a elevar precios, frenar inversiones o reducir contrataciones.
En un contexto de mayores aranceles, costos crecientes de insumos, competencia global y presión regulatoria, Coparmex afirmó que imponer más impuestos sin una visión estratégica “profundiza los retos de productividad y movilidad social”, a la vez que encarece la formalidad. Alertó que, ante mayores cargas, algunos negocios podrían trasladarse a la informalidad, afectando a empresas, trabajadores y gobiernos por igual.
El organismo hizo un llamado a los congresos estatales para que las discusiones fiscales de este año privilegien la competitividad, el empleo formal y la atracción de inversiones, especialmente en el marco del T-MEC y la relocalización de cadenas de suministro. Recordó que 27 de las 32 entidades mantienen tasas de ISN iguales o menores al 3%, por lo que rebasar ese umbral coloca a cualquier estado en desventaja frente a sus competidores.
Finalmente, Coparmex solicitó que los presupuestos estatales prioricen servicios públicos de calidad, infraestructura de largo plazo, proyectos estratégicos y ampliación de la base de contribuyentes antes de imponer nuevas cargas a quienes generan empleo. Reafirmó su compromiso con las MiPyMEs —“el corazón de la economía mexicana”— y con la construcción de un entorno que fortalezca la inversión, el empleo formal y el Estado de Derecho.