Narco se apropia de las fiestas clandestinas en Cancún, Playa del Carmen y Tulum: sexo, drogas y alcohol a disponibilidad de menores.

Las fiestas clandestinas donde ofrecen drogas y alcohol a menores de edad y a turistas sigue aumentando su número sin control en las ciudades de Playa del Carmen, Tulum y Cancún.

De acuerdo a los reportes de la Secretaría de Seguridad Pública, tan sólo en lo que va de este año se han desarticulado 48 de estos eventos, que van desde encuentros en lotes baldíos en colonias populares, hasta fiestas “de lujo” en villas o departamentos de lujo, siendo turistas jóvenes sus principales asistentes.

En el 2021 fueron descubiertos 648 de estos “reventones” fortuitos. En al menos la dos terceras partes de ellos se detectó la venta de drogas y alcohol para menores. De continuar la tendencia actual, para este 2022 se espera que el número se duplique.

“Las fiestas clandestinas siempre han sido un evento presente en Quintana Roo. Sin embargo, adquirieron una mayor relevancia en los últimos dos años, cuando las restricciones sanitarias provocaron un aumento en su demanda para que los jóvenes puedan divertirse, sin tener que cumplir con el aforo limitado, uso de cubrebocas, o tiempos límite de ventas de bebidas alcohólicas”, declaró el abogado y criminalista Jaime Ceballos Díaz.

Citó que semejante a lo que sucedió durante la época de la prohibición de bebidas alcohólicas en Estados Unidos a inicios del Siglo XX, el crimen organizado en Quintana Roo también se está apropiando de estos eventos.

“De acuerdo a las investigaciones que se han realizado, ya no se trata de simples fiestas organizadas por grupos de jóvenes que buscan evadir las restricciones sanitarias, o de dueños de bares que permanecían cerrados por la pandemia. Ahora se han identificado células criminales encargados de realizarlas, para distribuir droga, ofrecer prostitución y hasta extorsionar a algunos turistas que caigan en estos lugares”, declaró.

Citó que antes las invitaciones a estos lugares se hacía a través de las redes sociales, de manera abierta. Sin embargo, actualmente se han creado grupos de whatsapp y telegram para los interesados, evadiendo de esta manera a la policía.

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