CIUDAD DE MÉXICO.- En el último año, la tarifa eléctrica de los hogares mexicanos se ha incrementado cerca de nueve por ciento, una tasa por arriba de la inflación general que en mayo fue de 7.65 por ciento, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Incluso, entre diciembre de 2018 y mayo pasado, en el periodo que lleva la administración federal del presidente Andrés Manuel López Obrador, la electricidad ha tenido un aumento acumulado de 20.29 por ciento.
Esta variación es casi tres puntos porcentuales mayor al alza que ha tenido la inflación general, según datos del Inegi.
El pasado jueves, el instituto dio a conocer el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) de mayo, donde destacó una reducción en las tarifas eléctricas respecto al mes previo, debido a los subsidios gubernamentales en la región norte del país en temporada de calor.
Los precios de la electricidad disminuyeron 20.36 por ciento a tasa mensual debido al inicio del programa de tarifas eléctricas de temporada cálida en Mexicali, Ciudad Juárez, Culiacán, Chihuahua, Hermosillo, Matamoros, Colima, La Paz, Huatabampo, Ciudad Jiménez y Esperanza.
Sin embargo, analistas consultados por este medio esperan que las tarifas sigan en aumento conforme a la inflación.
Víctor Ramírez, socio de Grupo Perceptia21, recordó que desde enero de 2019 las tarifas domésticas están indexadas al INPC.
“El 28 de diciembre de 2018, la SHCP publicó un decreto en el que estableció que el costo de la tarifa doméstica se iba a actualizar conforme a la inflación, independientemente de si sube o baja el precio del gas u otros insumos necesarios para su generación”, comentó Ramírez.
El acuerdo publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF) indicó que las tarifas domésticas de bajo consumo del suministro básico de electricidad, que son la mayoría, se actualizarán únicamente con base en la inflación.
Ramírez dijo que pese al inicio de la temporada de calor y el subsidio que el gobierno aplica en algunas partes del país, los precios de la electricidad van a seguir aumentando a menos que la inflación se detenga, “y no hay condiciones para que esto pase”.
De acuerdo con analistas e instituciones financieras, los precios en México seguirán al alza este año y el próximo derivado de diversas situaciones nacionales y externas, como afectaciones en las cadenas de suministro, alzas en los precios de los combustibles y el conflicto en Ucrania, así como amenazas de nuevos contagios de Covid-19.
Casiopea Ramírez, socia de Fresh Energy Consulting, coincidió en que las tarifas eléctricas se mantendrán altas a consecuencia de la inflación y que esto tendrá impactos económicos.
“Desafortunadamente en esta administración no hemos visto movimientos a la baja en las tarifas (…) A partir de 2019 solo están reflejando inflación, lo cual puede generar un déficit tarifario porque si los combustibles incrementan su costo más que la inflación, esa variación de costos no se va a recuperar con lo que le cobras al usuario final”, apuntó.
Además de estar indexadas a la inflación, las tarifas eléctricas se han visto afectadas por un sobrecosto provocado por el déficit de energía que hubo en el país a causa de una tormenta invernal en el sur de Estados Unidos, en el primer trimestre de 2021, lo que congeló las gasoductos entre ambas naciones y encareció los costos del gas natural, principal producto para la generación de electricidad en México, refirió Casiopea Ramírez.
“Además de eso (la inflación), cada mes se añade un sobrecosto para cubrir el déficit que se generó el año pasado cuando subieron mucho los precios de gas por el problema de febrero en Texas”, apuntó.
En el Acuerdo A7039/2021, en el que la Comisión Reguladora de Energía (CRE) autorizó los cálculos y ajustes de tarifas a la CFE para este año, reconoce un diferencial de 38 mil 519 millones de pesos debido a costos adicionales por las Contribuciones al Déficit del Pago a las unidades contratadas en el Protocolo Correctivo aplicados en 2021, entre ellos los pagos adicionales por gas proveniente de Texas.
Ramírez explicó que este diferencial, que quedó en pagarse en un plazo de 24 meses, se ha añadido a las tarifas y por eso su precio se ha elevado más que el de la inflación general.
Para Víctor Ramírez el costo de la energía eléctrica podría ir bajando si el país tuviera contratos a largo plazo con empresas de energías renovables.
“Pero no se han tenido y estamos dependiendo en buena manera del gas natural y otros combustibles (…) Hay proyectos, pero están detenidos”, concluyó.
Fuente: El Sol de México