Víctor Hugo Sosa, es el alcalde de San Pedro Huamelula, Oaxaca y contrajo nupcias con una caimán de 7 años, a quien además de nombre se le vistió como una típica novia con vestido blanco y velo.
El motivo se remonta a 230 años atrás, pues es un ritual para atraer la abundancia y prosperidad al lugar.
Los creencias apuntan que el caimán es la deidad de la madre tierra y la unión entre el alcalde y el animal simboliza la conexión entre los humanos y lo divino.
«Pedimos a la naturaleza que llueva lo suficiente, que haya comida, que tengamos peces en el río», dijo Sosa en la ceremonia según información de Reuters.
El ritual tiene como organizador a una “madrina”, en esta ocasión fue Elia Edith Aguilar quien tuvo la tarea de elegir las prendas de la futura esposa y también del viaje que ésta realiza.
El reptil fue bautizado como “Alicia Rubí” en la Iglesia de San Pedro Apóstol y son los apóstoles principales quienes se encargan de quitarle la “bestialidad”, según El Universal.
Posterior a esto inicia el viaje de la prometida, que es llevada en brazos por el capitán de la comparsa de mareños y con una banda de música a sus espaldas recorren las viviendas de los habitantes.
La boda culmina con un beso entre el alcalde y el caimá